San Pedro de Treviño, una iglesia con mucha historia
Fundada en el año 1161 por el rey Sancho VI el Sabio, la villa de Treviño ha sido un importante cruce de caminos a lo largo de la historia. Un pasado todavía visible en las calles y los edificios de la localidad.
El origen de este enclave se encuentra en un antiguo castillo en lo alto de la colina. Este atrajo una población que fue creciendo hasta alcanzar la zona baja que ocupa hoy en día Treviño.
Si bien su momento de mayor pujanza fue entre los siglos XII y XVI, la localidad aún conserva un entramado medieval con calles estrechas y alargadas y palacios renacentistas como el de los Manrique de Lara o el de los Izquierdo. Fue tal la relevancia de este lugar que llegó a contar con seis parroquias, de las cuales solo conservamos la de San Pedro Apóstol y los restos de los templos de San Juan y Santa María.
La construcción de la iglesia parroquial de San Pedro nos traslada a mediados del siglo XIII, posiblemente hacia 1252, momento en el que Alfonso X de Castilla otorgó el segundo fuero a la villa de Treviño.
En su parte exterior podemos disfrutar de dos conjuntos escultóricos de gran calidad: la portada tardorrománica y la imagen de la Virgen Blanca.
La portada del siglo XIII es el acceso principal a la parroquia y cuenta con 6 arquivoltas muy decoradas sobre una docena de columnas de fuste liso. La sexta arquivolta representa un interesante calendario en el que apreciamos los trabajos del campo y los signos del zodiaco. Por otro lado, los capiteles cuentan con detalles de temática vegetal y animales fantásticos como arpías.
La imagen de la Virgen Blanca se encuentra en un chaflán junto a la cabecera del templo. Realizada en el siglo XIII, a sus pies apreciamos la representación de una viña y a Daniel en el foso de los leones.
El interior de San Pedro es el resultado de una importante transformación realizada en el siglo XVIII. El único elemento tardorrománico que conservamos es la pila bautismal, ubicada en la capilla de San Raimundo de Peñaford.
El retablo mayor de 1720 es obra de José López de Frías. Es de estilo churrigueresco y cuenta con una gran decoración, en la que distinguimos las imágenes de las seis advocaciones de las antiguas parroquias de Treviño: Santo Tomás de Canterbury, San Juan Bautista, San Pedro Apóstol, San Miguel Arcángel, San Nicolás y Santa María.
Otros elementos de interés en San Pedro son la talla gótica del Santo Cristo y las tablas de Arana. El primero ha sido restaurado en 2010 y está asociado al conocido como Maestro de Treviño, autor de importantes imágenes alavesas y guipuzcoanas. Las tablas góticas, restauradas en 2007, son los retablos laterales y el sagrario de la localidad treviñesa de Arana.
Como podemos imaginar, esto solo es una pequeña píldora de todo lo que la villa de Treviño y el templo de San Pedro alberga. ¿Te gustaría conocer a fondo la parroquia? Gracias a la campaña de verano del Condado de Treviño el templo de San Pedro estará abierto de forma gratuita de martes a sábado con un horario de 11:00 a 14:00 hasta el día 24 de agosto. Más información a través de info@kalearte.com.